Nacho Ares – Enero de 2009
Director del proyecto italiano de excavación del templo funerario de Amenofis II en Luxor
Entrevista realizada el 5 de enero de 2009 en Luxor
Junto al Rameseum, el templo funerario de Ramsés II, lindando con el camino que lleva a este templo de millones de años, se encuentra el de Amenofis II. Desde hace poco más de una década es excavado por una misión arqueológica italiana dirigida por el Dr. Angelo Sesana. Presidente del Centro Comasco di Egittologia “F. Ballerini” Como, la asociación transalpina dedicada al estudio del antiguo Egipto, su lengua y las culturas del Mediterráneo, que él mismo creara en 1993. Antes del templo de Amenofis II, el Dr. Sesana trabajó en el Valle de las Reinas y en el propio Rameseum de la mano del Dr. Leblanc.
Nos encontramos con el Dr. Sesana durante el descanso que hace el grupo para desayunar en la cafetería del Rameseum. “Estamos trabajando en nuestra campaña número 11. Los primeros trabajos serios se realizaron en el año 1999, pero ya el año anterior llevamos a cabo una pequeña inspección de campo. Era prácticamente una colina de detritus que tardamos casi dos años en eliminar. Paulatinamente iba viendo la luz la estructura del templo. Flinders Petrie excavó aquí a finales del siglo XIX, más o menos hacia 1894-1895. Su única intención era conocer el nombre de la persona que mandó construir el templo. Por lo tanto se puede decir que somos los primeros en trabajar en el templo de Amenofis II ya que en todo este tiempo nadie ha excavado aquí desde Petrie. No olvidemos que el antiguo camino de tierra que llevaba hasta el Rameseum pasaba justo por encima del templo. Tuvo que ser movido unos metros hacia el norte para que pudiéramos trabajar”.
La estructura original del santuario hace pensar que, como sucede con todos los templos funerarios de esta parte de la necrópolis, los pilonos de acceso estaban localizados sobre lo que hoy es la zona de cultivo que se abre en la parte oriental. De ellos no se conserva absolutamente nada. Hace pocos años se realizó una cata a modo de sondeo para buscar la posición de los pilonos y, desafortunadamente, no se encontró nada. Hay que contar también que la zona en donde debía de estar la entrada al templo hoy es paso de las canalizaciones de agua del cercano restaurante del Rameseum por lo que la humedad ha debido de destruir completamente los pilonos.
“Cuando empezamos a trabajar nos percatamos de otro problema. No olvidemos que el problema que ha tenido este templo de Amenofis II es que, siendo vecino del de Ramsés II, muchas de sus piedras fueron reutilizadas en la construcción del Rameseum, lo mismo que sucedió con el de Amenofis III o el de Merneptah. Sabemos que durante el Tercer Período Intermedio, el templo se utilizó como necrópolis. Realmente son tumbas de poca importancia. En algunos casos hemos encontrado vasos canopos o restos humanos. Pero en líneas generales se trata de una necrópolis bastante pobre con la cámara funeraria de las tumbas excavadas prácticamente en la arena. Su excavación ha sido bastante peligrosa.
El hecho de que pasaran por encima durante años los autobuses y coches que acercaban los turistas al templo de Ramsés II ha hecho que la estructura de estas habitaciones sea muy inestable. El peligro de derrumbe es grande por lo que su excavación se nos presenta como algo impensable, ni siquiera colocando pilares de sujeción del techo. Al ser todo arena, su utilidad sería prácticamente nula. Este tipo de tumbas son muy comunes en la zona ya que todo el pie de la montaña es una necrópolis de este período o incluso de un tiempo antes, el Imperio Medio”.
El equipo italiano trabaja prácticamente un mes al año en el yacimiento. Se autofinancian casi completamente. Muchos de los especialistas se pagan ellos mismos el viaje y la estancia durante ese mes. “El equipo que viene de Italia lo formamos una veintena de personas entre antropólogos, arqueólogos, egiptólogos, etc. En cuanto a obreros locales, contamos con casi 200 personas. No olvidemos que las dimensiones del yacimiento son realmente grandes, más de 10.000 metros cuadrados.