Templo de Luxor – Galería de imágenes

Tebas oriental

El templo de Luxor se encuentra en el corazón de la antigua Tebas y al igual que el de Karnak estaba consagrado al dios local Amón-Re, aunque en el de Luxor se veneraba a una de las manifestaciones especiales de la divinidad, tomando la forma de Min bajo la denominación de Amón-Min. Era conocido con el nombre de Opet del Sur o “Lugar de Retiro” y a su dios con el de Amenemope o “Amón del Opet”.

El núcleo del templo, tal como se conserva en la actualidad, fue construido por Amenhotep III, quién se hizo representar en sus paredes simbolizando su nacimiento divino. La barca de Amón tiene una capilla construida también en época de este rey III y reformada por Alejandro, quien además se hizo representar como faraón junto a su padre Amon-Min en los relieves del sanctasanctórum.

Las obras fueron posiblemente a cargo del arquitecto Amenhotep y se llevaron a cabo en dos fases: una primera constituida por un complejo formado de múltiples dependencias sobre una plataforma elevada que hoy en día constituye el extremo sur del templo y una segunda formada por un gran peristilo solar abierto al norte y las bases para la erección de una gran columnata.

Sin embargo, las obras se interrumpieron durante el reinado del hijo de Amenhotep III, Ajenatón, quien intentó ignorar todo lo relacionado con el dios Amón. Por tanto, la columnata permaneció inacabada y sin decorar, hasta que ascendió al trono el joven Tutankhamón, quien restauró de nuevo el culto de Amón en Tebas.

La estructura permaneció invariable hasta que llegó Rameses II, quien mandó levantar un gran patio con pilares y un pilono, construido sobre un nuevo eje, orientado hacia el este, para alinearse con el templo principal de Amón, en Karnak ( con el que se comunicaba a través de una vía procesional ) La longitud total del templo es de 260 m.

Cuando los visitantes europeos del siglo XIX contemplaron los restos del templo de Luxor quedaron admirados por su majestuosidad. El templo se hallaba cubierto de arena, pero sobresalían los dos obeliscos de la entrada y las estatuas de Rameses II. Uno de estos obeliscos, ofrecido a Francia, se alza hoy en la plaza de la Concordia, en París. En el pilono del templo está esculpida la batalla de Qadesh y en una esquina del patio hay tres capillas dedicadas a las barcas sagradas de Amón, Mut y Jonsu.

El santuario estaba protegido por una muralla con varias puertas de entrada, que se abrían según la festividad celebrada. Al pueblo le estaba permitido acceder hasta el patio de Rameses II para contemplar la fiesta de Opep, la más importante de la localidad y en la que el dios viajaba desde el templo de Karnak al de Luxor a través de la avenida de las esfinges.

 

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